Si has conseguido ahorrar un dinero extra, una de las mejores inversiones financieras (y emocionales) es amortizar parte de tu hipoteca. Pero llega la eterna duda: ¿qué es mejor, bajar la cuota mensual o acortar el plazo del préstamo?
Reducir Plazo: La opción del ahorro total
Casi siempre es la opción financieramente más inteligente. Al reducir el tiempo que le debes dinero al banco, te ahorras pagar intereses durante esos años eliminados.
- Ventaja: Ahorras muchos más intereses a largo plazo.
- Desventaja: Tu obligación mensual sigue siendo la misma, lo que no alivia tu economía diaria inmediata.
Reducir Cuota: La opción de la tranquilidad mensual
Esta opción consiste en mantener la fecha de fin de tu hipoteca pero pagar menos cada mes.
- Ventaja: Tienes más liquidez cada mes para otros gastos o imprevistos.
- Desventaja: Ahorras menos intereses totales porque sigues pagando durante el mismo número de años (aunque sobre un capital menor).
¿Cuándo elegir cada una?
- Elige Plazo si: Quieres pagar lo mínimo posible al banco y puedes asumir tu cuota actual sin problemas.
- Elige Cuota si: Vas un poco ahogado a fin de mes o prevés que tus ingresos pueden bajar en el futuro.
Para tomar la decisión correcta con tus propios números, usa nuestro simulador gratuito:
Calculadora de Amortización de Hipoteca
Recuerda revisar si tu banco cobra comisiones por amortización anticipada, aunque en muchos casos están limitadas por ley.
